12/17/2006

Por cada Mujer.....

Por cada mujer.....que ya tiene en su mente ideas de inhalar su propia libertad .... Por cada mujer fuerte,cansada de aparentar debilidad,hay un hombre debil cansado de parecer fuerte...... Por cada mujer cansada de tener que actuar como una tonta,hay un hombre agobiado por tener que aparentar saberlo todo ........ Por cada mujer cansada de ser calificada como "Hembra Emocional" hay un hombre a quien se le ha negado el derecho de llorar y a ser delicado...". Por cada mujer catalogada como poco femenina cuando compite,hay un hombre obligado a competir para que no se dude de su masculinidad. Por cada mujer cansada de ser un objeto sexual,hay un hombre preocupado por su potencia sexual Por cada mujer que no ha tenido acceso a un trabajo o a un salario satifactorio,hay un hombre que debe asumir la responsabilidad economica de otro ser humano. Por cada mujer que desconoce los mecanismos del automivil , Hay un hombre que no ha aprendido los secretos del "arte"de cocinar Por cada mujer que da un paso a su propia liberacion,hay un hombre que redescubre el camino hacia la libertad La humanidad posee dos alas,una es la mujer,otra el hombre hasta que las dos alas no esten igualmente desarrolladas,la humanidad no podra volar Necesitamos una nueva Humanidad,necesitamos volar Ahora mas que nunca la causa de la mujer es la causa de toda la Humanidad B Boutros Ghali

Oya en el Mundo

En el Africa Oyá es la diosa del río Niger (este río lleva el nombre de la diosa. Los Yoruba la llaman Udo Oyá, pues según el mito, cuando Changó se ahorcó, Oyá que era su primera esposa, derramó tantas lágrimas que se convirtió en río) que corre al norte y al este del territorio Yoruba. Sin embargo, su importancia y culto no se limita a las áreas bañadas por este río. Esto se debe a que Oyá es algo más que una diosa fluvial, y ella, al igual que su esposo Changó se relaciona con fenómenos atmosféricos temidos en todo el territorio Yoruba. Los Yoruba dicen que Oyá es una feroz y valiente amazona, que acompaña a su esposo, el dios del trueno, en sus frecuentes guerras. Se dice de ella que es Obirin t' o t' ori ogun da rungbon si (la mujer a quien le creció una barba debido a la guerra). Su cara es tan terrible que nadie se atreve a mirarla. Sin embargo, Oyá es alta, distinguida y gracil. Prueba de ello es que Changó la tomó como esposa de entre dieciséis diosas que deseaban casarse con él. Oyá se ganó el cariño de Changó, gracias a su elegancia y a la fuerza de su personalidad. Oyá, es la diosa de las tempestades y del viento fuerte que las precede. Se dice de ella que es Efuele ti' da gi l'oke-l'-oke (el viento que arrasa y arranca los árboles desde la cima). Esta diosa también se conoce con el nombre de Yansan, y es la única oricha que tiene el poder de dominar a los muertos. A veces Oyá se manifiesta encarnada en el cuerpo de uno de los Egungun, miembros enmascarados de una sociedad secreta que se ocupa específicamente del culto a los antepasados. Los enmascarados son la encarnación de los muertos que visitan a los familiares del difunto, hablando y actuando como si fueran el propio pariente desaparecido. Entre todos los Egungun, el Oyá Egungun es el más temido, ya que posee una máscara de apariencia terrible. Esa debe ser la razón por la que los afrocubanos dicen que a Oyá no se le puede mirar la cara. Oyá es adorada en varias partes de Yoruba. En Lokoro, cerca de Portonovo, a pesar de estar muy distantes del Niger, hay un templo consagrado exclusivamente al culto de esta diosa. En el altar está la imagen de Oyá rodeada de ocho cabecitas simbolizando al río Niger y a las muchas bocas de su delta. El símbolo de esta diosa guerrera es la lanza. También se la representa por medio de un objeto hecho de metal en forma de rayo o descarga eléctrica. Cuando baja lleva en la mano un sable y un rabo de caballo o iruke, símbolo de autoridad. Oyá representa un ideal femenino ajeno a la cultura Yoruba. Entre los Yoruba, las mujeres no formaban parte del ejército como sucedía con otros pueblos del Africa occidental ecuatorial. Según las tradiciones, Oyá es originaria del norte del país Yoruba. Es posible que en algún lugar de esa área, las mujeres fueran utilizadas en la caballería real como lo eran en el Dahomey, nación donde ella es conocida como divinidad relacionada con los fenómenos atmosféricos. Parece que fue en el Dahomey, donde la diosa adquirió su carácter de amazona intrépida y violenta, ya que en Yoruba las realidades ambientales no parecen justificar la función del culto a una divinidad femenina tan interesada en actividades que en su cultura son propias de los hombres. En Cuba En Cuba, Oyá no aparece como una divinidad fluvial, sino como la diosa de las tempestades y del terrible viento que las precede. También se asocia con otros fenómenos atmosféricos, tales como la centella, la tromba de viento, el rayo, etc. Su culto es muy importante, no solamente por su relación con las tempestades, y por ser esposa de Changó, sino también por su extraña asociación con los muertos. En Cuba, Oyá no es la primera esposa de Changó, como se la considera en Africa, sino la segunda. Es una mujer esbelta, y corpulenta, de carácter violento y apasionado. Se dice que cuando se enfada es más peligrosa que Changó, quien se casó con ella debido a los múltiples servicios que esta valiente mujer le prestó en sus guerras. Se dice que a Oyá le gusta tanto la guerra como a su esposo Oyá es la dueña de la centella, los temporales y la puerta del cementerio y su color emblematico es el rojo vino o los estampados de flores de muchos colores. Se le representa por una hermosa mujer muy femenina, valiente y aguerrida, de temperamento apasionado y violento. Sus armas principales son el iruke y el machete. Posee nueve caminos o avatares, en los que se nombra: 1) Oyá Bí, 2) Oyá Funké, 3) Oyá Dumí, 4) Oyá Minuí, 5) Oyá Obinidoso, 6) Oyá Ayowá, 7) Oyá Odó-oyá, Yansá Ororí y 9) Oyá de tapa. En la Regla Kimbisa del Santo Cristo del Buen Viaje se le llama Mpungu Mamawanga, Yaya Kengue, Mariwanga y Monte Oscuro; en Brillumba es Mpungo Mamawanga y Kengue; en Mayombe: Centella Endoqui, Remolino, Noche Oscura, Viento Malo, Malongo, Vira Vira, Mayanquera y Nueve Sayas Una Cinta. En la Sociedad Secreta Abakuá: Onifé En el culto Arará es Yawarinumé, Addañon y Dañe; en el Cabildo lyesá, Naé y en el Gangá, Oyá Weri. En Haití En Haití la llaman Yansán. Santo Domingo En este país recibe los nombres de Feribundda y Oyá. La primera es guardiana de los alrededores del cementerio, vive siempre entre llamas y carbones encendidos, su símbolo es el fuego y sus colores el amarillo y el verde; la segunda es símbolo y encarnación de la justicia y se le considera como una divinidad guerrera que ayudó a Changó en su guerra contra Ogún Balendyó. Cuando interviene en un combate, su espada, la cual maneja con especial habilidad, echa fuego. Gusta de ciertos árboles como el álamo y sus colores son los del arcoiris. Se le invoca para curar enfermos mentales y expulsar espíritus maléficos. Changó Cult de Trinidad-Tobago Oyá aparece como diosa del viento y la lluvia, posee un temperamento ardiente, hasta el punto de concebirla como un huracán y trabaja con una güira y una copa. En Brasil Es una de las mujeres de Xangó y divinidad del río Niger, del viento y las tempestades. Se le llama lansá y es considerada como orisha de temperamento ardiente e impetuoso. Su vestimenta simbólica consta de una corona, adorno reservado sólo a los reyes yorubas y nagos, cuyas sartas de cuentas disimulan los ojos; un sable de cobre y un rabo de caballo, todos símbolo de su alta jerarquia. Sus danzas son guerreras e imitan, en sus movimientos, a las tempestades y los vientos desencadenados; en ellas baila con los brazos extendidos y las manos hacia el frente, para atraer las almas de los muertos, ya que ella es su dueña. Sus adeptos portan collares rojo granate y, cuando se manifiesta, se le saluda con los gritos de ¡Epa rei! . Sus colores emblemáticos son el rojo, el coral y el marrón. En la Umbanda es el amarillo oro y en el Candomblé el marrón. Por su carácter inquieto, altivo y emprendedor es muy popular entre las mujeres. Ialorisha Miriam ti Oya

La sanacion del "Ego"

Un camino espiritual ... que no sea un sueño más del ego..." Pensemos.............. Casi todos los humanos sueñan sinceramente con ser personas buenas, apacibles, solidarias, honestas, transparentes, valientes, generosas, compasivas y llenas de amor, porque éstas son las cualidades que definen realmente a una persona “espiritualizada”, además de algunas otras como la paciencia, la humildad, el olvido de uno mismo.En fin todo aquello que hace al Iwa a Pele. Sin embargo, la realidad diaria de estas mismas personas que sueñan con vivir de manera espiritual es que son coléricas, agresivas, vengativas, impositivas cuando no crueles. Esta es la verdad; uno es así y los que nos rodean, más o menos son iguales. Si esto no fuera verdad, el mundo no estaría tan enfermo. Ya casi no nos damos cuenta porque estamos inmersos en él, pero con sólo salir a la calle, corremos el riesgo de ser asaltados, golpeados, cuando no asesinados. Una de las razones de esta situación, por no decir la razón principal, es precisamente ésta.Tantas veces hemos escuchado que culpan a Eshu por los malos actos. Aferrandose cada uno a su propio Ego,creyendose dueños de la verdad absoluta.Las personas sueñan con la paz y el amor pero no ven que ellas mismas provocan guerra y odio. Lo provocan porque lo llevan dentro. Seamos realistas, verídicos, me atrevo a decir, seamos científicos. preguntémonos: “¿Qué dice la Verdad?” La verdad dice que a veces expresamos amor hacia uno mismo o hacia nuestros semejantes y otras veces odio, que en algunos momentos nos sentimos llenos de alegría y en otros de resentimientos y ganas de venganza etc. Aceptemos de entrada que en cada uno de nosotros existe enojo, resentimiento, celos, envidia, lujuria, soberbia, despecho, prepotencia, odio y algo más. Pero recordemos también que todo esto es natural. Y todo esto es natural. ¡Sí! ¡Natural sí, pero espiritual no! “Es natural”, es decir que está en las características fundamentales de la naturaleza humana, y lo podemos averiguar en nosotros y en nuestros semejantes si observamos las reglas siguientes: 1) No juzgar, no criticar, no comparar, ni a uno mismo ni a los otros. 2) Perdonarse a uno mismo y perdonar a los otros y a la vida. 3) Cesar de calificar de bueno o de malo lo que somos y lo que nos rodea. A partir de la observancia de estas reglas (que no es tan fácil practicar), nos situamos interiormente en una postura de neutralidad, o, si ustedes prefieren, de objetividad que permite a la persona ver lo que antes no podía ver por más que estuviera frente a ella. Pero a que me refiero sobre el verdadero camino de la "espiritualidad"que no llegue ser un sueño mas del Ego? Hoy el yoga, la meditación, el budismo, el sufismo, la búsqueda del Ángel, el Cuarto Camino, la metafísica, para no hablar de otras corrientes como el feng shui, están de moda. ¡Qué bien! Existen realmente sed y hambre de espiritualidad, ¿quién lo podría negar? Pero existe muchísima confusión y para desgracia de la mayoría de las personas que se meten en estas disciplinas, la confusión predomina. " Entran en un proceso espiritual que es ni más ni menos que un sueño del ego". Me refiero al hecho tan compartido de adentrarse en disciplinas de meditación, de acentuar sus creencias ya sea en Ifa,candomble,umbanda,kimbanda,palos , de contacto con nuestro Ángel, etcétera, sin antes emprender un verdadero trabajo de sanación de la individualidad, es decir, del ego. Todos sabemos que la meta de la vida espiritual es la desaparición del famoso "ego". En este punto todos los buscadores espirituales están de acuerdo; pero lo que se ignora casi siempre es lo siguiente: Un ego enfermo no puede desaparecer, o sea, morir a sí mismo. ¿Cuales son las enfermedades del ego? Ya lo sabemos, aunque no nos guste admitirlo: resentimiento, venganza, envidia, celos, lujuria, soberbia, prepotencia, odio, pero también depresión, miedo, codicia, angustia, etcétera. La conclusión es que toda verdadera espiritualidad o también religión empieza con la sanación del ego, lo que corresponde a la práctica de una vida ética. Al empezar un camino espiritual con ejercicios muy buenos intrínsecamente, ya sean meditaciones, rituales, sin haber previamente empezado a sanarnos de nuestra soberbia, tiranía, odio y las otras enfermedades, endurecemos el ego en vez de madurarlo y llevarlo hacia el punto de desarrollo en el cual ya es capaz de aceptar su propia desaparición. Muchas veces e escuchado miles de definiciones de Olodunmare,sin que ninguno de todos,digan el es solo "Humildad"como unica definicion Sólo a partir de una postura interior de humildad podremos empezar la sanación del ego. Gracias a la humildad nos someteremos a una enseñanza impartida por una persona viva que haya alcanzado esta maravillosa libertad interior Ialorisha Miriam ti Oya


Al reverenciar cada manifestación de la naturaleza, se establece una conexión con las entidades espirituales que habitan en ella, esto es una fuente de poder.